Miopía infantil: una epidemia del siglo XXI

El uso constante de dispositivos electrónicos ha convertido a la miopía en uno de los problemas más comunes en niños y adolescentes alrededor del mundo. Sin embargo, ésta es una de las discapacidades visuales más fácilmente corregibles si es tratada a tiempo. Se puede restablecer la visión normal mediante lentes de marco, lentes de contacto o cirugía.

La miopía es un defecto de refracción o error en el enfoque visual. Una persona miope ve claramente los objetos cercanos, pero percibe de forma borrosa los objetos que se encuentran a distancia. (ver tratamientos)

Esta condición suele ser hereditaria y se descubre a menudo en edad escolar, por lo que puede afectar el desempeño de los niños en la escuela, pues se les dificulta distinguir palabras y números en la pizarra. Especialistas han detectado que en los últimos años, la progresión de los casos de miopía ha aumentado en niños y adolescentes, aparentemente debido al uso excesivo de dispositivos móviles que afectan y perjudican la visión.

¿Cómo reconocer problemas de visión en tu hijo?

Los pequeños no saben distinguir si ven bien o mal. A continuación te explicamos algunos síntomas que puede presentar tu hijo y a los que debes estar atento:

  • Se queja porque no ve la pizarra.
  • Acerca mucho los libros para leer.
  • Se sienta cerca del televisor.
  • Entrecierra los ojos para intentar ver mejor.

Si has detectado alguno de estos síntomas en tu pequeño no dejes de acudir a un especialista. Es preciso visitar a un oftalmólogo ante cualquier signo de dificultad visual en los niños. Así podrán recomendarte el mejor tratamiento para evitar que esta condición se desarrolle.

En la Clínica Santa Lucía contamos con un tratamiento único, a través de lentes especiales que detienen el avance de la miopía en niños y adolescentes. Nuestros pequeños pacientes utilizan los lentes mientras duermen de manera cómoda y sin dolor, mientras estos ejercen una leve presión natural que corrige la forma del ojo, para darle al paciente hasta doce horas de correcta visión para que se desenvuelva durante toda la mañana siguiente sin necesidad de lentes. Sin duda la calidad de vida de los niños mejora notablemente.

¡No dejes que pase el tiempo!

La miopía debe ser corregida una vez que ha sido detectada. El tratamiento más común en niños y adolescentes es el uso de lentes, ya que se debe esperar a que los ojos se desarrollen completamente (al llegar a la adultez) para tomar la decisión de realizar una cirugía. En la actualidad existen lentes especiales para niños que les permiten realizar sus actividades cotidianas normalmente, son armazones livianos, flexibles y de un material difícil de dañar para que el pequeño sienta la menor molestia posible.

No olvides que un correcto diagnóstico y tratamiento le permitirá a tu hijo contar con una mejor calidad de vida al mejorar su agudeza visual. Con el paso de los años se torna más difícil corregir el sistema visual del niño e incluso podría llegar a ser irreversible, al no tratar el problema de manera adecuada.

 

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Fuente:

Organización Mundial de la Salud: who.int
Revista Ser Padres: serpadres.es
Diario Digital ABC: abc.es
Instituto de Microcirugía Ocular: imo.es

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